Backstreet Boys en Chile

Anoche los Backstreet Boys estuvieron en concierto en Santiago, por primera vez los cinco juntos en Chile desde el Festival de Viña 98'. Y aunque decidí no ir porque prefería guardarme para otro concierto que se viene en Septiembre, ahora creo que quiero llorar, volver el tiempo atrás, y comprar la entrada.

Cuando los BSB eran famosos, onda, explosión de fama, yo era chica, tenía como 8 años y escuchaba sus canciones con mi tía, que tenía 5 años más que yo. Recuerdo que amaba con pasión a Brian, que sufrí con su operación, que me sabía las canciones, que bailaba "Everybodyyyy yeeeeeeah", que tenía sus dos cassettes a la fecha, y que tenía el albúm de salo lo más lleno de láminas que podía. Luego lo recorté e hice un mural en mi pieza. Amor máximo.

Con los años bajaron el perfil, se separaron, volvieron, sacaron discos que no cacho, pero en medio de todo siempre me gustó el juego de voces que hacían juntos, y las canciones romanticonas que sacaron, cuando dejaron tanta coreografía y se separaron un poco de lo que es una boyband tal cual. O al menos siempre creí que los BSB eran una cosa aparte.

De hecho, creo que sus canciones amorositas son las que más me gustan. Nadie puede evitar prenderse con las movidas, y son re buenas, pero hay un cariño especial a sus voces cuando están en modo mamón. Cómo olvidar "Show me the meaning of being lonely" y el video que da penita cuando cada uno aparece enfrentando las cosas tristes que les pasaron en la vida.  O el video de "The one" donde hay una recopilación tan buena de sus conciertos, que más ganas me dan de haber ido.

Cuando viene algún cantanto o grupo a Chile, a menos que anden en algún tour de nuevo disco que uno se sabe de memoria, es la tremenda caída de carnet. Estar ahí parado coreando las canciones que te sabes de años, con las que tienes un montón de historias y se las dedicaste a un montón de gente. Y al final, darte cuenta que te gustan un montón sin importar el desgaste de las modas en la música, es rico. 

Pensaba, por otro lado, que comparando su primera visita en 1998, se nota el paso de los años en ellos. No sé si es que uno cuando es chica encuentra a todos los chiquillos con carita de pavo muy lindos, pero en realidad eran harto desabridos. Ahora que una es más grande y ve las cosas con más calma y seriedad (oh, si!), los BSB más grandecitos están harto más ricos. 

Nanai, chiquititos.

¡Como el vino!

 Yo tenía mi concierto de Viña grabado en un VHS que obligaba a una de mis primas a ver, cada vez que iba a mi casa. Yo creo que la tenía aburrida, pero la obligaba y le decía que aprovechaba de aprender inglés, la tremenda mula que le vendía. Me pregunto donde estará ese VHS, hace años que no lo veo, pero les dejo el video que encontré en youtube, solo por invitarlas a que se les caiga el carnet conmigo.

¿Cuál es su BSB favorito? ¿Les siguen gustando? ¿Están como el vino?



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